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Segundo semestre 2017
El trabajar es uno de los aspectos esenciales del ser humano
adulto. Desde el punto de vista del fomento de la salud psi-
cológica, el trabajo tiene un valor inmenso: nos ayuda a cons-
truir identidad, nos sitúa dentro de un sector social, nos permite
ejercer aptitudes y obtener nuevos conocimientos, amplía una
red social de apoyo y crea una estructuración del tiempo, del
día a día. El mismo Freud definía a la salud como “Lieben und
arbeiten”,
es decir “la capacidad de amar y trabajar”, explicitán-
dolo como una actividad esencial de la vida adulta.
Por otra parte, Christophe Dejours (2010) refiere que “no
hay trabajo neutro para nuestra salud mental” y esta es una fra-
se que tiene un peso enorme a nivel psicológico: se refiere a
que, al momento de trabajar, el ser humano no puede quedar
indiferente a su trabajo, este influirá en él invariablemente. Ya
sea para bien o para mal, el trabajo nos marca como seres hu-
manos; sin embargo, al pensar en él siempre debemos tener en
cuenta que somos trabajadores en un medio ambiente especí-
fico que nos influye de una manera particular, es imposible tra-
tar de entender al ser humano si no entendemos su contexto.
Al momento de hablar de seguridad laboral generalmente
el discurso se centra en el trabajador, en su falta de experien-
cia o en su “exceso de confianza”, sin tener en cuenta como
la organización en la que está inserto ese trabajador es la que
refuerza o castiga las conductas seguras o inseguras. Es en ese
sentido que los accidentes son una consecuencia del sistema
organizacional en diversos sentidos muy concretos: las orga-
nizaciones ponen las condiciones físicas que permiten, sostie-
nen, favorecen o impiden los accidentes. De esta forma, las
organizaciones proveen los procesos de trabajo y las relacio-
nes laborales que generan, aceleran o desaceleran la aparición
de accidentes. Una forma de hacerse cargo de la seguridad de
los trabajadores es tener en cuenta el contexto en el que es-
tos realizan su trabajo, específicamente de los riesgos psicoso-
ciales a los que están expuestos.
Factores de riesgo psicosocial
Los riesgos psicosociales son entendidos como todas las situa-
ciones y condiciones laborales que se relacionan con el tipo de
organización, el contenido del trabajo y la ejecución de la tarea.
Estos factores pueden afectar en forma negativa el bienestar y
la salud física, psíquica y/o social de los trabajadores, su calidad
de vida y eficiencia en el trabajo, así como influir de manera po-
sitiva o negativa en sus conductas de seguridad. Los principales
factores de riesgo psicosocial a los que se pueden ver expues-
tos los trabajadores:
Organización y condiciones del empleo: se refiere a mate-
rias de seguridad y estabilidad en el trabajo, formas de co-
municación y acceso a la información y ausentismo por en-
fermedad.
Trabajo activo y desarrollo de habilidades: se refiere a las posi-
bilidades de desarrollo en el trabajo, control de los tiempos, li-
bertad para la toma de decisiones e integración en la empresa.
Demandas psicológicas: éstas se tratan de exigencias de tipo
cuantitativas y emocionales, además de esconder emociones,
sensoriales y cognitivas.
Relaciones al interior del trabajo: se refiere a la calidad de la
relación y el apoyo social de los superiores, la relación con los
compañeros de trabajo y apoyo social de los mismos.
Doble presencia: esta categoría alude a la preocupación que
las tareas del trabajo doméstico y/o familiar producen en el
trabajador.
Seguridad laboral y riesgos psicosociales, una
responsabilidad organizacional
Daniela Campos Schwarze
Jefa del Departamento de Riesgos Psicosociales ACHS
La intervención en contra del estrés,
previniendo la exposición a riesgos
psicosociales, es tarea de todos
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