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Segundo semestre 2016
Riesgo biológico en trabajadores sanitarios.
La vacunación
constituye una medida preventiva en trabajadores expuestos
a riesgo biológico en el medio sanitario, es decir, todos los tra-
bajadores que están en contacto directo con los pacientes y/o
sus muestras biológicas.
La exposición al riesgo biológico de los trabajadores sanitarios
se puede producir por medio de diferentes vías, siendo las princi-
pales la vía sanguínea (por sangre o fluidos biológicos contamina-
dos por ella, a través de punciones, cortes, o salpicaduras a mu-
cosas o piel no intacta), la vía aérea (por gotas si su diámetro su-
pera los 5 µm o respiratoria si el tamaño de las gotas es menor)
y la de contacto (de persona a persona o a través de un objeto).
Todo ello implica a diferentes agentes biológicos (como he-
patitis B, parotiditis, varicela, rubeola, sarampión, gripe esta-
cional, meningitis, difteria, tétanos y tos ferina) con posibilidad
de causar infecciones en humanos, muchas de ellas preveni-
bles mediante vacunas.
Como en otros aspectos preventivos, en la valoración de la
indicación de vacunación de los trabajadores sanitarios, el mé-
dico del trabajo debe considerar las tareas que realizan este
tipo de trabajadores.
Vacunación en trabajadores sanitarios
La vacunación en los trabajadores sanitarios protege al traba-
jador y también disminuye las infecciones transmitidas en los
centros sanitarios denominadas infecciones nosocomiales. Hay
que tener en cuenta que se han descrito casos de infecciones
nosocomiales en trabajadores sanitarios, como los de saram-
pión recientemente en un país europeo (1).
En cuanto a la protección de los trabajadores sanitarios, tie-
ne relevancia la protección de ciertos trabajadores especial-
mente sensibles, como trabajadoras embarazadas, o con pato-
logía como infección de VIH, inmunosupresión severa, asple-
nia, insuficiencia renal o diabetes (2).
Se ha demostrado, por ejemplo, que la vacunación de los
trabajadores sanitarios reduce la transmisión nosocomial de
gripe en los centros sanitarios (3) y la morbimortalidad rela-
cionada con gripe de los pacientes atendidos (4,5), viéndose
también una reducción en la incidencia de gripe en los traba-
jadores sanitarios (6).
Desde hace mucho tiempo sociedades científicas, organis-
mos y autoridades sanitarias nacionales e internacionales han
establecido recomendaciones de vacunación para el personal
que trabaja en centros sanitarios. Estas recomendaciones se
van revisando y actualizando cada cierto tiempo en función
sobre todo de las circunstancias epidemiológicas y del desa-
rrollo de las vacunas.
Las recomendaciones norteamericanas de la ACIP (Advi-
sory Committee on Immunization Practices) tienen un espe-
cial reconocimiento internacional entre los profesionales impli-
cados en la salud pública (2). Las últimas recomendaciones de
la ACIP sobre vacunación para el personal sanitario (Figura 1)
distinguen dos categorías en ellas:
Vacunación como medida preventiva en
trabajadores expuestos a riesgo biológico
en el medio sanitario
Mª Teresa del Campo
Jefe de Servicio de Salud Laboral y Prevención
Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz, Madrid. Grupo Quirónsalud
Figura 1.
Se debe incidir en aumentar y mejorar
la información y las estrategias de
vacunación en los trabajadores sanitarios
PRL EN el sector sanitario