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Octubre 2015
requieran por su mayor siniestralidad o por el subrregistro que
soportan.
El tercer objetivo
es mejorar el registro de los accidentes de
trabajo y las enfermedades profesionales, así como disponer de
indicadores de siniestralidad armonizados.
El cuarto objetivo
consiste en favorecer la participación y la
corresponsabilidad de los agentes sociales en los procesos de
seguridad y salud en el trabajo, mediante el diálogo social tripar-
tito en igualdad de condiciones.
El quinto objetivo
es el de fortalecer las estructuras de re-
gulación, inspección, control y vigilancia de la seguridad y salud
ocupacional. A través del mismo se pretende asegurar la sufi-
ciente dotación de recursos para estos organismos, a la vez que
garantizar su independencia, todo ello como factores indispen-
sables para dotar de una mayor coherencia a los sistemas pre-
ventivos.
El sexto objetivo
es avanzar en el control de la seguridad y
salud en el trabajo en las relaciones de subcontratación, dado el
incremento del número de empresarios que recurren a las con-
tratas y subcontratas. Este tipo de relaciones laborales pueden
favorecer una mayor siniestralidad y en muchos casos sin noti-
ficación ni registro.
El séptimo objetivo
es avanzar en el desarrollo de la vigilancia
preventiva de la salud de los trabajadores, puesto que una de
las carencias puestas de manifiesto en las encuestas de condi-
ciones de trabajo es el escaso desarrollo de la medicina del tra-
bajo y la vigilancia de la salud de los trabajadores.
El octavo objetivo
es la incorporación a la planificación estra-
tégica de riesgos laborales de políticas de género, protección de
menores y otras poblaciones vulnerables.
El noveno objetivo
es potenciar el desarrollo de la cultura
preventiva, pues la escasa sensibilidad social pone de manifiesto
la necesidad de trabajar en esta línea, con políticas adecuadas a
las diferentes necesidades nacionales.
tación de la seguridad y salud y de sus posibilidades de desarro-
llo económico y social.
La II Estrategia no sólo pretende incidir en la vertiente pre-
ventiva y en la seguridad y salud, sino que se concibe además
como una contribución positiva para mejorar la calidad del em-
pleo, tratando concretamente de conseguir el desplazamiento
de la economía informal a la formal, con todo lo que este obje-
tivo supone. El documento tiene en cuenta también otra serie
de factores, entre los que se encuentran la inclusión de la me-
dicina y la psicología ocupacional en la gestión de la seguridad y
salud laborales, la especial consideración de los colectivos más
sensibles a la siniestralidad, la incardinación de las políticas de
género y la protección de la infancia en la seguridad y salud, la
integración progresiva de la prevención en la gestión de las pe-
queñas empresas y el fomento de la participación de los agen-
tes sociales en el desarrollo de los programas nacionales de se-
guridad y salud laboral.
11 objetivos principales
Bajo estos principios y compromisos, la II Estrategia, que fue
aprobada por el Pleno del VII Congreso de Prevención de Ries-
gos Laborales en Iberoamérica, celebrado en octubre de 2014
en la ciudad de México D.F., se articula en torno a los siguien-
tes 11 objetivos principales, siempre con el propósito general de
contribuir a la reducción continua y progresiva de los accidentes
de trabajo y las enfermedades profesionales en la región, jun-
to al desarrollo progresivo de estructuras nacionales de segu-
ridad y salud que permitan alcanzar niveles óptimos de eficien-
cia en esta materia:
El primer objetivo
es reducir la informalidad y potenciar la
generación de empleo decente con protección social. A pesar
de los avances conseguidos en este ámbito, la realidad es que
una buena parte de la población trabajadora de Latinoaméri-
ca tiene escasos niveles efectivos de protección social, estimán-
dose que en torno al 50% de la población trabajadora está en
esta situación, lo que en definitiva supone precariedad, ausen-
cia de derechos laborales y de protección social, especialmente
para colectivos como la población infantil, las mujeres o la po-
blación indígena.
El segundo objetivo
es avanzar en el diagnóstico de la segu-
ridad y salud en el trabajo y en el análisis de la información es-
tadística. Y es que continúa siendo imprescindible conocer la si-
tuación en cada país para abordar políticas públicas eficaces, es-
pecialmente en los sectores, ámbitos y colectivos que más lo
organismos e instituciones
La II Estrategia 2015-2020 está basada en
los diagnósticos de situación que se han
derivado de la ejecución de la I Estrategia