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Octubre 2015
Las manos y los brazos son la primera herramienta de traba-
jo de las personas, lo que les convierte en la parte del cuerpo
más frecuentemente damnificada cuando ocurre un acciden-
te laboral con baja. En este artículo se muestran las cifras de
accidentabilidad laboral con baja producidas en 2013, los ries-
gos que pueden provocar estas lesiones y los tipos de guantes
de protección disponibles bajo las normas armonizadas corres-
pondientes.
Accidentes en jornada de trabajo que afectan a las extremi-
dades superiores
Los datos publicados por el Ministerio de Seguridad y Traba-
jo para el año 2013 muestran que, un año más, las manos y los
brazos son las partes del cuerpo afectadas en más medida por
los accidentes laborales con baja. Como podemos observar el
gráfico 1, los accidentes en jornada de trabajo con bajas produ-
cidas por lesiones en las extremidades superiores ascienden a
165.683 de los 468.030 accidentes totales en 2013, lo que su-
pone el 35% de los accidentes totales en jornada de trabajo
con baja, porcentaje que se ha mantenido inalterado en los úl-
timos años.
Analizando los datos más al detalle nos encontramos la si-
guiente distribución de los accidentes con baja dentro de las ex-
tremidades superiores: en primer lugar los dedos y manos con
un 34% y 20% respectivamente, y en tercer lugar los brazos que
reciben un 16% de los accidentes. El hombro y articulaciones del
húmero corresponden al 15% y la muñeca al 12%.
Equipos de protección laboral para la protección de manos y
brazos
A la hora de afrontar la reducción de riesgos laborales, existen
medidas preventivas que la empresa debe hacer primar sobre
el uso de los EPI. La Ley de Prevención de Riesgos Laborales
establece que los EPI son el último recurso al acudir si el resto
de medidas preventivas no han conseguido eliminar o reducir
el riesgo de manera que no sea peligroso para la salud del tra-
bajador. Cuando el resto de medidas no son suficientes, el EPI
constituye la última barrera que tiene el usuario para proteger-
se de los riesgos asociados a la tarea que esté llevando a cabo.
Para que el EPI proteja adecuadamente, debemos asegura-
rnos que cumple con los requisitos de seguridad y salud del Real
Decreto 1407/1992 y usarlo según el Real Decreto 773/1997.
En la tabla 1 analizamos los riesgos a los que puede
exponer el trabajador a sus manos y brazos y cuáles
son las normas armonizadas destinadas a certificar
los guantes y protectores de brazos.
Requisitos generales. UNE-EN 420
Los requisitos generales para los equipos destinados
a la protección de manos y brazos quedan definidos
en la norma UNE-EN 420:2004+A1:2010. Esta nor-
ma no debe utilizarse por sí sola sino que debe com-
binarse con otra u otras normas específicas.
Guantes y protectores de brazo contra riesgos me-
cánicos. UNE-EN 388
Los guantes y protectores de brazo destinados a pro-
teger contra los riesgos mecánicos de abrasión, cor-
te por cuchilla, rasgado y perforación deben cumplir
con la norma UNE-EN 388:2004 que será aplicable
únicamente en combinación con la Norma UNE-EN
420:2004+A1:2010.
Se considera guante contra riesgos mecánicos
cuando proporcionan protección, al menos, uno de
Accidentabilidad laboral en España.
Protección de manos y brazos
Francisco José Mancebo
Técnico de ASEPAL
Gráfico 1. Accidentes en jornada de trabajo con baja por parte del cuerpo lesio-
nada en 2013. Fuente: Ministerio de Empleo y Seguridad Social
equipos de proteccion