La Norma Oficial Mexicana NOM-035-STPS-2018 establece los criterios de gestión de los riesgos psicosociales en las empresas del país. Por un lado, obliga a identificar a los trabajadores que sufrieron acontecimientos traumáticos severos durante o con motivo del trabajo. Por otro, de acuerdo con el tamaño de la empresa, obliga a identificar y analizar los factores de riesgo psicosocial, así como a evaluar su entorno organizacional.
Para realizar estas acciones, la norma establece criterios y procedimientos que las empresas deben seguir, además de que brinda los instrumentos que pueden aplicarse para recopilar la información que sustente el análisis. Sin embargo, no describe un método en específico para identificar y analizar riesgos psicosociales ni para evaluar el entorno organizacional.
Ante el vacío de la NOM respecto del método para desarrollar tanto la identificación y análisis de los riesgos psicosociales como la evaluación del entorno organizacional, es necesario que las empresas adopten uno. Esto supone la aplicación de conocimientos en metodología y estadística que no todos los responsables del análisis poseen y que traen consigo diversos retos.
Los retos metodológicos y técnicos para la aplicación de la NOM-035
La identificación y análisis de riesgos psicosociales y la evaluación del entorno organizacional se desarrollan en cuatro etapas:
- Planeación.
- Diseño y organización.
- Recolección de datos.
- Análisis e interpretación de resultados.
En primer lugar, la planeación implica la comunicación y sensibilización en las empresas sobre las disposiciones de la NOM y los instrumentos que presenta para la recopilación de información. Además, en esta etapa se deben identificar las necesidades específicas de la empresa con el fin de elaborar un diagnóstico.
En la etapa de diseño y organización se elabora el instrumento para la recopilación de información y se planea la logística de su aplicación. Aunque las empresas pueden crear y validar su propio instrumento, es mejor utilizar los cuestionarios provistos por la NOM en sus tres ‘Guías de Referencia’ para cumplir con sus requisitos. Su aplicación requiere la selección de la muestra; el diseño del plan de análisis (cuantitativo y cualitativo); la preparación de los recursos y herramientas para la aplicación de los cuestionarios y el procesamiento de información; y la capacitación y coordinación del personal responsable de la aplicación.
Uno de los retos del diseño es que la NOM brinda una fórmula para el cálculo del tamaño de una muestra representativa cuando las empresas tienen más de 50 trabajadores, pero depende de la experiencia del responsable del análisis que los cuestionarios se apliquen de forma homogénea entre los trabajadores. En este sentido, el responsable del análisis puede aplicar la técnica de muestreo probabilístico más idónea con el fin de que el grupo en el que aplique los cuestionarios represente al total de trabajadores y no haya una sección que esté sobrerrepresentada.
La Norma Oficial Mexicana NOM-035-STPS-2018 establece los criterios de gestión de los riesgos psicosociales en las empresas del país
La etapa de recolección de datos consiste en la aplicación de los cuestionarios y la verificación de que, al final, cumplan con las características para ser procesados. Dado que la norma no es específica si los cuestionarios deben aplicarse de modo presencial, es posible recurrir a las TIC para evitar que la aplicación del diagnóstico detenga las actividades diarias de las empresas.
En este caso, se pueden usar aplicaciones digitales, como formularios de Google, con los que se puede replicar la estructura de los cuestionarios de la NOM y dar la oportunidad a los trabajadores de responderlos cuando deseen. La ventaja de usar herramientas como ésta es que agiliza el procesamiento de datos, pues no es necesario contar con un equipo de codificadores que capturen los datos en una hoja de cálculo.
El análisis e interpretación de los resultados, fundamental en la identificación y evaluación de riesgos
El análisis e interpretación de los resultados comprende el procesamiento de la información a través de dos actividades:
- La captura de los cuestionarios en hojas de cálculo y programas estadísticos (como Microsoft Excel o SPSS Statistics) o la organización de los resultados obtenidos en las aplicaciones digitales.
- El análisis estadístico con base en los criterios de calificación enmarcados por la NOM-035-STPS-2018.
La evaluación de los riesgos psicosociales se basa en un análisis de estadística descriptiva, es decir, en la generación de frecuencias absolutas y relativas (o porcentajes). Para ello, es necesaria la codificación de las respuestas en función de los rangos de evaluación establecidos por la NOM. Los resultados obtenidos de la codificación son la base sobre la que se diseñan los programas de atención y prevención, por lo que deben ser lo más precisos posibles.
Debido a algunas imprecisiones de la NOM-035, los responsables de la identificación y análisis de riesgos psicosociales se enfrentan a la posibilidad de incurrir en errores que afecten la toma de decisiones en su atención y prevención
En el caso de la identificación de trabajadores que han sufrido un acontecimiento traumático severo, el análisis de resultados es vital porque con éste se debe emitir un diagnóstico y tomar la decisión de canalizarlos para su atención clínica. Aunque la NOM brinda instrucciones sobre cómo emitir los diagnósticos, es obligación de los investigadores aplicar las operaciones matemáticas y de programación indicadas para codificar los datos, es decir, para distinguir a los trabajadores que debe canalizar la empresa de los que no a través de las respuestas que dieron en cada sección del cuestionario.
Finalmente, para enriquecer la evaluación de riesgos, se pueden enfatizar algunos criterios de análisis; el primero de ellos es la descripción de datos sociodemográficos. Aunque la norma especifica en qué casos se deben recopilar estos datos, es un aspecto que todos los cuestionarios deben contemplar porque permite contextualizar las evaluaciones, conocer el perfil de los empleados y plantear programas orientados a grupos definidos de trabajadores.
El segundo criterio de análisis que puede enriquecer la evaluación de riesgos son las tablas de contingencia y las pruebas inferenciales. Sobre esto, el análisis de estadística descriptiva se puede complementar con pruebas como Chi Cuadrado de Pearson para determinar la existencia de correlaciones significativas entre variables de análisis del mismo cuestionario u otras, como las características sociodemográficas. Sin embargo, se recomienda que un equipo especializado en análisis estadísticos aplique este tipo de pruebas, ya que existe la posibilidad de que un error vicie los datos obligatorios y, por ende, afecte la toma de decisiones en materia de atención y prevención de riesgos psicosociales.
Debido a algunas imprecisiones de la NOM-035, los responsables de la identificación y análisis de riesgos psicosociales se enfrentan a la posibilidad de incurrir en errores que afecten la toma de decisiones en su atención y prevención. Por ello, es necesario contar con equipos especializados en investigación empírica y estadística para hacer más eficientes las fases de diseño, logística, trabajo en campo, análisis e interpretación de resultados. Esto dará mayor precisión a los programas y, en consecuencia, un valor agregado a los procesos de gestión de riesgos.