Seguridad Laboral Latam 009

48 Primer semestre 2020 El petróleo es la base sobre la que se estructura la economía energética mundial y de acuerdo a los da- tos de la Agencia Internacional para la Energía, lo va a seguir siendo por mucho tiempo 1 . La exploración de nuevas áreas de prospección y explotación (i.e.: ártico, aguas ultra profundas) y la aplicación de nuevos desarrollos tecnológicos (i.e.: fracking ) pueden suponer nuevos riesgos para los tra- bajadores del sector y tienen implicaciones medioam- bientales que han saltado al debate público. Nuevas fronteras para la exploración y producción de hidrocarburos en LATAM El desarrollo de recursos no convencionales en paí- ses como EE. UU. y Canadá ha relanzado su activi- dad extractiva, fomentando un aumento de la pro- ducción industrial en todos los sectores, impulsando el aumento de la actividad económica global y la baja- da de los costes energéticos. Muchos países de LATAM basan sus economías en el petróleo desde hace décadas. Brasil, Venezuela, Ecuador, Ar- gentina y Colombia son los mayores productores de crudo y gas de la región, a pesar de los vaivenes de sus economías y la inestabilidad jurídica de alguno de ellos 2 . Sin embargo, el creci- miento y la estabilización económica de algunos países de la re- gión ha traído consigo un aumento de la demanda de recur- sos energéticos y esta, en la mayoría de los casos, no ha venido acompañada de un aumento de reservas disponibles. Tan solo Brasil ha sido capaz de acceder al enorme poten- cial de sus reservas costa afuera ( offshore ), convirtiéndose en el mayor productor de crudo de LATAM, por encima inclu- so de México, el tradicional líder en producción de la región, y de Venezuela, que es el país con más reservas de crudo del mundo. Nuevas áreas de desarrollo de reservas, “offshore” y no convencionales, una oportunidad para Colombia A pesar de que, recientemente, Colombia se ha convertido en el cuarto mayor productor de petróleo en América Latina, su- perando a Argentina, Ecuador y Perú, su prioridad es aumentar sus reservas confirmadas de petróleo. Según datos de la Agen- cia Nacional de Hidrocarburos (ANH), en 2015 se cuantificaron 2.002 millones de barriles en reservas, a pesar de que más del 50% del territorio total aún no se ha explorado. Si estimamos que más del 30% de los pozos explorados tiene éxito, el potencial desarrollo de reservas de yacimientos offsho- re y no convencionales permitirían triplicar las reservas del país. Además del acceso a los recursos, la posición de Colombia se vería muy beneficiada por la situación geográfica como único país de América del Sur con puertos en el Atlántico y el Pacífi- co, lo que permite un acceso directo las rutas marítimas de ex- portación. La Ronda Colombia de 2014 -organizada por la ANH- ob- tuvo resultados muy positivos después de que se asignaron 26 concesiones. En números absolutos, esto podría representar in- versiones de más de 1.400 millones USD en campañas explo- ratorias, tanto en tierra ( onshore ) y costa afuera ( offshore ) en los próximos años. En esta ronda licitatoria se puso especial énfasis en la explo- ración de recursos no convencionales, que podrían significar un renovado impulso en el sector petrolero del país. Las potenciales reservas de hidrocarburos no convenciona- les se extienden a lo largo de tres de sus 23 cuencas: las del Valle Medio del Magdalena, los Llanos y Catatumbo, con cerca de 55 Tcfs. Adicionalmente, existen formaciones potenciales en las cuencas de Caguan-Putamayo, Cesar-Rancheria y Cordille- Riesgos de seguridad ocupacional asociados al “fracking” José Campuzano Talavera HSE Operational Lead EMEA-Repsol Exploration Fuente BP Statistical Review World Energy 2018. (https://www.bp.com/en/ global/corporate/energy-economics/statistical-review-of-world-energy.html) PRL EN el sector

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