Formación de Seguridad Laboral 196
/ Julio-Agosto 2024 66 prl en la industria química L a prevención de riesgos la- borales y la salud laboral en general es una disciplina relativamente nueva, y si nos referimos al sector químico en particular, se podría decir que está en pañales. En el presente artículo no se pretende realizar una exposición técnica exhaus- tiva y sesuda (de las que hay mucha bibliografía) sino verlo desde otro punto de vista, quizás más coloquial. Pero que nos haga reflexionar sobre la verdadera importancia de estos temas y no quedar- nos en el eterno “postureo”. Un ejemplo a tener en cuenta es la famosa fotografía en blanco y negro de la construcción del edificio RCA en el Rockefeller Center de Nueva York en 1932 donde se muestra a varios traba- jadores almorzando, sentados en una viga a más de 250 metros de altura, sin las mínimas medidas de seguridad, ni siquiera un arnés o una simple cuerda de sujeción. Otro ejemplo, vinculado al sector químico, sería el de Maria Salomea Skłodowska-Curie, primera y única per- sona en recibir dos premios Nobel en distintas especialidades científicas, Físi- ca y Química, que falleció en 1934 por anemia aplásica causada por la exposi- ción de la radiación en sus investigacio- nes. Leyes y normativas Afortunadamente, las cosas han cam- biado mucho desde entonces: se han desarrollado numerosas leyes y norma- tivas para mejorar la seguridad y salud laboral en todos los ámbitos, incluidos los de la industria química. Se realizan infinidad de cursos de formación en pre- vención de riesgos laborales, incluso en acciones formativas de carácter técnico que se precie: es imprescindible un mó- dulo dedicado a la PRL y salud laboral e, incluso, a la perspectiva de género (pero ese es otro tema). En definitiva, da la impresión de que la sociedad en general y la industria quí- mica en particular está sobradamente “prevenida” y “segura”, al menos teó- ricamente y de cara a la galería. Nada más lejos de la realidad: da la impresión que hay una sobreexposición aparente y a efectos prácticos queda mucho por hacer, tanto a nivel de las distintas admi- nistraciones como de las empresas, y por supuesto, por parte de los trabajadores. Un par de ejemplos Me gustaría presentar un par de ejem- plos de los que he sido testigo, uno de ellos muy visual, de carácter general, y otro que podría catalogarse cuasi de malas prácticas en nuestro sector. En el primero de ellos: un empleado público estaba realizando labores de limpieza de cristales en un edificio pú- Seguridad laboral: el enemigo oculto F élix J esús D íez V icente C olegiado n º 4171 del C olegio O ficial de Q uímicos del S ur
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