Formación de Seguridad Laboral 192

“Aquel que prevé, es dueño de sus actos”. Johann Wolfgang Goethe / Noviembre-Diciembre 2023 5 opinión D urante el año 2023 que concluye ‘Formación de Seguridad Laboral’ ha contribuido de nuevo a difundir las mejores prácticas en prevención de riesgos laborales a través de sus páginas, en nuestra web y en redes sociales y en diversos eventos. El primero de ellos consistió en una jornada dedicada a la seguridad y la salud en el trabajo en la industria alimentaria, en lo que fue el mayor encuentro en PRL de este sector en 2023. La cita, con un gran éxito de afluencia de pú- blico, conmemoró el Día Internacional de la Seguridad y la Salud en el Trabajo, cuyo lema en esta ocasión fue “Un entorno laboral seguro y saludable”. Ya en el mes de mayo, FSL y la Federación Metalúrgica Valenciana (FEMEVAL) organizaron de manera conjunta en la sede de esta entidad una jornada titulada “Casos de éxito y buenas prácticas en PRL en la industria del automóvil, auxiliar y afines”, con un programa repleto de interesantes ponencias por parte de reconocidos expertos. En octubre tuvo lugar el Open Show Tecnológico, organizado por el Grupo Borr- mart (empresa editora de la revista FSL), que estuvo orientado a las smart cities , en el que se trataron temas como la transformación tecnológica en la gestión del EPI, el almacenamiento de productos químicos dentro de edificios industriales o la protección auditiva, entre otros, cuyo reportaje el lector encontrará en el presente número. Otra de las acciones que llevamos a cabo fue la convocatoria de los “VIII Pre- mios de Seguridad y Salud Laboral”, cuyo fallo se conocerá en próximas sema- nas, una vez recibidas las candidaturas, las cuales revisarán y evaluarán el pres- tigioso jurado. Por último, destacar el reparto en Düsseldorf (Alemania) de la revista en el kios- co de prensa de A+A, antesala del otro gran evento internacional que será SICUR 2024 (del 27 de febrero al 1 de marzo, en IFEMA Madrid). El evento alemán mundial puso el acento en dos tendencias: la digitalización y la sostenibilidad. Este último concepto será uno de los grandes protagonistas de nuestro calendario editorial en 2024. Su integración (y desarrollo) en la preven- ción de riesgos laborales resulta crucial. Y es que los recursos del planeta son limitados: por ello hay que pensar en las futuras generaciones. El compromiso con la sostenibilidad debe ser real, no una mera apariencia. Pero en todo momento debe ser compatible con un verdadero cumplimiento de la normativa relativa a la seguridad y la salud laboral. La reducción de los residuos generados por los equipos de protección individual debe ser la nota predominante. Como desafíos y retos específicos hay que recordar que el reciclaje no es suficiente para generar nuevos EPIS, y en algunas ocasiones las materias primas sostenibles no protegen lo suficiente y las alternativas que sí que lo hacen son sumamente caras, impactando en la producción, competitividad y en el coste final del producto. Asimismo, hay que asumir que existen EPIS no reciclables, pero bien es cierto que otros sí que lo son, por lo que resulta posible reducir notablemente la huella medioambiental. El embalaje de estos equipos y la durabilidad de los mismos son otros dos factores que repercuten favorablemente en la sostenibilidad, así como apostar por materias primas no contami- nantes. A ello hay que añadir la relevancia decisiva en torno a la concienciación, tanto de empresas como de trabajadores, de los beneficios inherentes de lo descrito hasta ahora. Por todo ello podemos concluir que estamos ante un tránsito de la economía lineal (basada en el esquema de ‘adquirir, usar y tirar’), a la economía circular, también aplicada al mercado de la seguridad y la salud en el trabajo: un modelo de producción y de consumo en el que se reutiliza y se recicla, generando menos residuos e incentivando -en la medida de lo posible- que estos se empleen como materias primas de nuevos productos. 2024: la prevención de riesgos laborales camina de la mano de la sostenibilidad Existen EPIS no reciclables, pero bien es cierto que otros sí que lo son, por lo que resulta posible reducir notablemente la huella medioambiental