Formación de Seguridad Laboral 178

/ Julio-Agosto 2021 16 prl en la industria cárnica C on esta pregunta se pre- senta a sus compañeros un director en su primer día de trabajo. De inicio recibe incredulidad, desinterés, miradas huidizas. Silencio en la sala. Deja las pa- labras y demuestra que la pregunta iba en serio. Corrobora con hechos lo que para él es prioritario, las personas: Despide a todo un departamento por anteponer la productividad a la salud. Anuncia nuevas contrataciones para atender mejor a las personas. En ese momento las caras pasan a ser de sorpresa, admiración, ner- viosismo, expectación. Y aprovecha ese clima para avisarles, “preguntaré de nuevo”,.Les dice retadoramente: “¿cómo puedo ayudaros?” Entonces sí, una valiente se lanza al vacío y propone una mejora y después otro valiente presenta una segunda mejora y se inicia la rueda de la confianza, de la colaboración, del compañerismo, la de “somos un equipo y entre todos sa- caremos esto adelante. Y si no, por lo menos lo intentaremos”. Este personaje es el nuevo director del Hospital New Amsterdam, protagonista de una serie de éxito en la actualidad, aunque en realidad se estrenó en sep- tiembre del 2018 en EEUU. Los guionistas pretenden dibujar a un personaje que atrape a la audiencia, la que está frente a él, en la sala magna del hospital. Pero también a la que está cómodamente sentada en los sofás de sus casas, tras los televisores. Antes de que el nuevo director del hos- pital se hiciera famoso con estas palabras, Sidney Decker ya había dejado plasmado en sus publicaciones sobre seguridad y salud que lo más importante es poner a las personas en el centro de la toma de decisiones de las empresas. Solo hay que preguntarles: ¿qué necesitas para hacer bien tu trabajo? Después escucharles, obviamente, y tenerlo en cuenta. Donde otros ven que los trabajadores son el objeto que controlar, que corregir, que inspeccionar, como culpables de la mayoría de accidentes laborales, S. De- cker ve a las personas como la solución a los problemas que surgen en una em- presa. Ellos son la respuesta perfecta a la variabilidad que se vive en el día a día de una fábrica. Donde antes todo giraba en torno a listados de normas y más normas en todo tipo de trabajos con el objetivo, no siempre alcanzado, de reducir los inci- dentes, S. Decker da valor a las buenas prácticas, al saber hacer de las per- sonas, a su capacidad de adaptación, su resiliencia. Da valor también a las instrucciones claras y sencillas en las tareas de alto riesgo. Siguiendo esta filosofía en aras de ha- cer una compañía más segura para los que trabajan en ella, en Argal Alimenta- ¿Cómo puedo ayudarte? J avier B andrés R ubín de C elis R esponsable del S ervicio de P revención de A rgal A limentación S.A.

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