Formación de Seguridad Laboral 174

24 Noviembre-Diciembre 2020 Más información: [email protected] prl en el sector energetico El compromiso y el deber moral que cada organización adquiere respecto a los niveles de seguridad mínimos para la realización de sus actividades se con- vierten en pilares básicos sobre los que desarrollar su propia cultura de seguri- dad, la cual debe servir como guía ante los compor tamientos y actuaciones posteriores de sus colaboradores. Este modelo de cultura de seguri- dad, liderado siempre por la alta direc- ción, debe definir cuáles son los obje- tivos, planes de desarrollo y acciones a implementar, permitiendo de ese modo crear un sistema de gestión de la seguridad que sea aplicado desde todos los ámbitos de la organización, buscando la adaptación de las medi- das necesarias y la implicación de los colaboradores de manera directa en la consecución de los objetivos. Como cualquier sistema de gestión, en aras de una mejo- ra continua, debe ser consciente de las opor tunidades y de las mejores prácticas que existan en su sector, para analizarlas y aplicarlas en beneficio propio. En Galp, la excelencia en seguridad es nuestra mayor ambi- ción: por ello, todos los compor tamientos y acciones que rea- lizamos están orientados a alcanzar el ratio de cero acciden- tes en todos los niveles de la organización. Objetivo ambicio- so para el cual se ha desarrollado un plan estratégico de cara al periodo 2019-2022 que permitirá alcanzar y mantener este nivel de excelencia. Un buen ejemplo de iniciativas específicas desarrolladas a este fin, es la creación y adopción de unas Reglas de Seguridad (Galp Life Saving Rules) alineadas con los mayores estándares y buenas prácticas de la Associaton of Oil & Gas Producers (IOGP). Unas reglas que, mediante su adopción y cumplimien- to por par te de toda la organización, nos permite reforzar la seguridad y proteger la salud de todos nuestros colaborado- res, al reducir el riesgo de accidentes y lesiones en la ejecución de las tareas más críticas o de mayor relevancia. Estas reglas de seguridad, definidas y establecidas para determinadas tareas, que por su relevancia o peligrosidad de- ben estar garantizadas en su ejecución, son de obligado cumplimiento para to- dos los colaboradores, siendo estos res- ponsables a su vez, de velar por que se realicen de acuerdo con lo establecido en los procedimientos de cada una de ellas. Los ámbitos de aplicación de estas reglas son los siguientes: conducción de vehículos, acceso a espacios confinados, trabajos en caliente, exposición a línea de fuego, trabajos en altura, elevación mecá- nica de cargas, autorizaciones de trabajo, controles de seguridad y controles de ais- lamiento térmico y energético. Gestión de emergencias Otro ámbito muy impor tante, donde Galp incide y trabaja para desarrollar la responsabili- dad colectiva en materia de seguridad, es la gestión de las emergencias. Ante una emergencia o acciden- te es impor tante actuar de manera rápida, entrenada y plani- ficada, motivo por el cual todos los colaboradores deben te- ner muy interiorizado cómo compor tarse ante estas situacio- nes. Responder de manera ágil a este tipo de situaciones está muy relacionado con la definición de los planes de emergen- cia interna de cada instalación, documentos donde se estable- ce el rol que debe asumir cada colaborador y las pautas a se- guir en caso de activarse la emergencia. La formación conti- nua, así como la realización de simulacros de manera periódi- ca, nos permiten afrontar estas situaciones de manera segura y responsable. Otra buena práctica u opor tunidad de mejora la encontra- mos en la gestión de accidentes. Para que todos los colabora- dores asuman la cultura de seguridad y par ticipen en su desa- rrollo y aplicación, debe establecerse un clima laboral que les motive a informar sobre los accidentes o incidencias que ocu- rren, garantizando la investigación y análisis de acuerdo con el procedimiento establecido y conocido por todos. Informar re- Javier Peña Responsable del Servicio de Prevención de Galp España La responsabilidad crea seguridad