Formación de Seguridad Laboral 166

92 Julio-Agosto 2019 bienestar laboral Más información: [email protected] Durante mi etapa en Latinoamérica pude ver cómo muchas empresas, especialmente de construcción, –como es el caso de Avanzia (filial de ACS) o Iberdrola y otras muchas–, antes de comenzar sus jornadas laborales realizaban ejercicios de estira- miento, coordinación y fortalecimiento para preparar a sus tra- bajadores para el trabajo diario. De esta forma, previo a un curso práctico de trabajos en altu- ra para la empresa Iberdrola en Ciudad de México, me decidí a enseñar a los trabajadores unas posturas de yoga muy sencillas. Todos participaron muy activamente en la práctica. Unos ejercicios muy básicos sirvieron para preparar el cuerpo y la mente para un trabajo con alta demanda física y psíqui- ca. Los trabajadores sorprendidos resultaron ser unos yo- guis excepcionales. Más recientemente, en sudeste asiático, en países como Vietnam, Taiwán, China, etc., he podido ver cómo en mu- chas empresas de oficinas en sus ciudades más avanzadas, previo a la jornada laboral y de forma obligatoria, se reú- nen todos los trabajadores en la entrada principal y realizan ejercicios que normalmente son de taichí. Estos mejoran la concentración, la sincronización y el tono muscular. Segura- mente mejorará la productividad y, en gran parte, al reali- zar algo todos juntos y por igual, a mejorar lo que nosotros llamamos clima laboral. La ergonomía es la adaptación del puesto de trabajo al trabajador. Pero mi pregunta es: ¿no estaremos olvidando el cuerpo y mente humana en esta definición? Trabajar en un entorno seguro es tan importante como estar sano y feliz en el trabajo. sí te protege de un sobreesfuerzo puntual, bien sea originado por el manejo manual de cargas o bien por posturas forzadas. Meditación Por otra parte, la meditación favorece la con- centración en lo que estamos haciendo. Meditar no es dejar la mente en blanco o no pensar en nada, como mucha gente cree. Meditar implica po- ner todo el foco en lo que estamos haciendo. Vi- vir el presente. Más recientemente, se ha adopta- do el término de mindfulness, lo cual no significa otra cosa que disponer de una total conciencia en lo que estás haciendo y pensando. La práctica de la meditación o mindfulness seguramente evitaría más de un accidente laboral en tareas peligrosas que requieren especial atención, además de ayu- darte a dormir mejor y estar más descansado para el siguien- te día de trabajo. Respiración Y por fin la respiración. Parece lógico que para poder vivir hace falta respirar pero, ¿respiramos bien? Una cosa es vivir, y otra es mejorar nuestra calidad de vida. Ya me sorprendió hace años el primer curso que impartí de riesgos en puestos de trabajo con uso de la voz. Mi compañe- ra de Medicina Laboral nos demostró lo mal que respiramos y lo importante que es para poder hablar sin causar daño a nues- tras cuerdas vocales y evitar fatigarnos. Una respiración abdo- minal aumenta la capacidad pulmonar, mandando más oxígeno al cerebro y ayudándonos a pensar mejor, meditar y aumentar nuestro rendimiento físico. Si respirar es la base de la vida, ¿por qué no hacerlo mejor? Los estudios y las medidas preventivas derivadas de la ergonomía se centran en la máquina y el proceso, más que en el propio cuerpo humano

RkJQdWJsaXNoZXIy MzA3NDY=