seguridad laboral 161

Proteccion en altura y construccion 93 Octubre 2018 Más información: [email protected] procedimientos de trabajo y en las instrucciones facilitadas por el experto en prevención. Para este caso, es relevante su pre- sencia en trabajos que impliquen la caída de altura, el manejo de cargas izadas, trabajos en el interior de excavaciones y po- zos, en espacios confinados y en las zonas donde exista interre- lación de personas y maquinarias. Todo ello gira en relación a nuestro estándar de control de fatalidades, donde se definen las tareas que pueden generar la aparición de riesgos críticos y fa- tales para las personas. Otra de las tareas del monitor es la de inspeccionar de forma periódica las instalaciones y lugares de trabajo de la obra, con el fin de identificar posibles brechas en el cumplimiento de las normas de condiciones sanitarias e higiénicas. Para facilitar es- tas inspecciones y recabar KPIs para el departamento de pre- vención, creamos una herramienta denominada “listas de veri- ficación de conductas y condiciones” (VERCYC), que consta de diez listas para chequear desde trabajos en altura, hasta bode- gas o instalaciones de higiene y aseo. Esta herramienta es importante, no solo porque establece ta- reas personalizadas a cada monitor en función de su grado de conocimientos o habilidades, sino que además aporta al depar- tamento de prevención importantes indicadores sobre las bre- chas entre lo deseado y lo que realmente ocurre en terreno. De esta forma, permite que iniciemos campañas o capacitacio- nes destinadas especialmente a eliminar las condiciones o ac- ciones subestándar que los monitores observan con mayor fre- cuencia en sus inspecciones o tareas de observación directa. Finalmente, y no por ello menos importante, es la partici- pación activa de los monitores en las charlas de capacitación en terreno, aportando la visión de los trabajos desde el pun- to de vista de la discapacidad generada a raíz de una brecha en las normas o procedimientos que supone un accidente o enfermedad profesional. La concienciación de los trabajadores que aporta “uno de los suyos” es infinitamente más impactan- te que cualquier charla de autocuidado de un profesional de la prevención. Esto conlleva graves pérdidas económicas a las empresas y a la sociedad en general, siendo un lastre al desarrollo soste- nible del país que requiere generar un cambio en la cultura de las organizaciones. Esta gestión del cambio sólo se puede entender a través de la innovación en prevención de riesgos, creando herramientas que puedan atacar el problema y for- talecer la identificación de peligros y evaluación continua de los riesgos presentes en las obras de construcción. A este primer análisis, debemos añadir que la propia Ley 16.744 de Accidentes del Trabajo y Enfermedades Profesio- nales de Chile establece la obligación de que se reincorpo- re al mercado laboral a aquellos trabajadores que hayan su- frido un daño o lesión discapacitante. Esta última parte de la ley es la más complicada de cumplir, ya que finalmente la re- lación entre trabajador y empresa termina deteriorada por los diferentes procesos de indemnización. La labor de los monitores Con el apoyo de la Mutual de Seguridad CChC y su “Modelo de Atención Integral en Salud” (MAIS), tomamos contacto con los candidatos a ser “monitores de seguridad” teniendo en cuenta que no es requerimiento obligado que estos trabajadores dis- pongan de experiencia en el sector de la construcción, sino que se buscan competencias tales como la resiliencia, la adaptabili- dad, el compromiso con la empresa y el autocuidado en segu- ridad y salud. La labor principal del monitor de seguridad es observar en te- rreno las condiciones y acciones de los trabajadores para evitar la ocurrencia de nuevos accidentes o exposiciones que puedan generar daños a la salud. Es importante señalar que estos tra- bajadores no tienen conocimientos técnicos en legislación o se- guridad y salud, por lo que siempre estarán guiados en su labor por un experto en prevención de riesgos que gestionará la ca- pacitación continua y permanente del monitor en función de los riesgos críticos que deseamos controlar. Formación y análisis de trabajo seguro De esta forma el monitor recibe la formación precisa en terre- no referente a los riesgos que debe observar, actuando si es preciso de forma inmediata al detectar una situación sub están- dar. La idea primigenia es que se pueda detener la tarea, mejo- rar la condición subestándar y capacitar a las personas para evi- tar que la situación de riesgo se repita. Una de las primeras tareas del monitor al comenzar la jorna- da laboral es la de participar en la charla de cinco minutos y en la elaboración del análisis de trabajo seguro, con el fin de cono- cer de primera mano cuáles son las situaciones de peligro que pueden darse en la tarea, verificar quiénes formarán parte del equipo y los medios a utilizar, para así fortalecer el autocuidado de todo el grupo de trabajadores. A partir de ese momento, el monitor se centrará en analizar y observar aquellas subtareas en las que pueda aparecer un ries- go crítico siguiendo lo indicado en la matriz de peligros, en los