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44 Agosto 2018 seguridad en zonas atex Más información:
[email protected] En ocasiones tan sólo nombrar la palabra ATEX (atmósfera explosiva) genera de por sí una cierta sensación de temor e in- tranquilidad, tanto en la propia empresa que tiene ese riesgo en sus instalaciones como para el técnico de prevención que debe “enfrentarse” a valorar el mencionado riesgo y proponer las medidas preventivas necesarias. Y es que no han sido pocos los accidentes que a lo largo de los años han ocurrido relaciona- dos con atmósferas explosivas y con consecuencias desgracia- damente dramáticas. Además, se une a este hecho el pensamiento más o menos generalizado de que el riesgo de explosión por ATEX solamen- te puede darse en empresas relacionadas con actividades de ‘alto riesgo’ como refinerías, pirotecnias, grandes empresas quí- micas... Nada más lejos de la realidad: este riesgo es mucho más común de lo que solemos pensar, pudiendo estar presente en trabajos que se realizan de forma habitual en muchas pequeñas y medianas empresas dedicadas a actividades que en principio no se tiene esa percepción de alto riesgo de explosión. Sin embargo, ¡no todo son malas noticias! Afortunadamen- te disponemos de las herramientas preventivas necesarias para conseguir que una zona ATEX sea tan segura como cualquier otra parte de la instalación de una empresa. A lo largo del ar- tículo veremos ejemplos de actividades que pueden dar lugar a atmósferas explosivas, cómo identificar y clasificar una zona ATEX, qué debe contener el documento de protección con- tra explosiones, los requisitos que deben cumplir los equi- pos que utilicemos dentro de una zona ATEX y las medi- das preventivas que se deben implantar. ¡Comenzamos! ¿Qué se entiende por atmósfera explosiva? Como primer paso nos tendríamos que plantear qué se entiende por atmósfera explosiva. ¿Todo lo que pensamos que puede ser una zona ATEX realmente lo es? O por el contrario, ¿estamos obviando zonas ATEX que de- ben ser evaluadas como tal? Si nos remitimos al Real Decreto 681/2003 sobre la “protección de la salud y la seguridad de los trabajadores expues- tos a los riesgos derivados de atmósfe- ras explosivas en el lugar de trabajo” po- demos obtener la definición de atmósfe- ra explosiva como “la mezcla con el aire, en condiciones atmosféricas normales, de sustancias inflama- bles en forma de gases, vapores, nieblas o polvos, en la que, tras una ignición, la combustión se propaga a la totalidad de la mez- cla no quemada”. ¿Qué tipos de actividades pueden dar lugar a una atmósfera explosiva (ATEX)? En el inicio del artículo comentaba que existe el pensamiento generalizado de que el riesgo de explosión por ATEX se en- cuentra asociado a cierto tipo de actividades de ‘alto ries- go’ tales como empresas químicas, refinerías, pirotecnias, etc. No cabe duda de que este tipo de empresas llevan asociada la formación de zonas ATEX “per se”, pero también existen otras actividades o procesos no tan evidentes en las que se puede generar una atmósfera explosiva. ¿Cómo se puede generar una atmósfera explosiva? Llegados a este punto, necesitamos cono- cer cómo se genera una atmósfera explo- siva para así saber establecer las medidas preventivas oportunas para evitar una ex- plosión, para la cual se necesita que se en- cuentren presentes todos y cada uno de los siguientes elementos: Seguridad en zonas ATEX Carlos Maya Santa Cruz Departamento de Prevención y Desarrollo de la Cultura de la Salud de Fraternidad-Muprespa
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