formacion seguridad laboral 143

PRL EN EL SECTOR sanitario 97 Octubre 2015 estén contaminados por agentes biológicos de los grupos 3 ó 4 se seleccionarán medidas de contención de entre las que fi- guran en la columna A del anexo IV del mismo Real Decreto, con objeto de minimizar el riesgo de infección. Las medidas existentes en dichas salas estaban encaminadas a contener agentes biológicos del grupo 3. Éstas eran: 1. El lugar de trabajo se encontraba separado de otras activi- dades que se desarrollan en el resto del hospital. 2. El aire extraído de las habitaciones se filtraba mediante la utilización de filtros de alta eficacia para partículas en el aire (HEPA). 3. Solamente se permitía el acceso al personal designado. 4. El lugar de trabajo podía precintarse para permitir su des- infección. 5. Existían procedimientos de desinfección especificados. 6. Las habitaciones se mantenían con una presión negativa respecto a la presión atmosférica. 7. Se controlaban los vectores, por ejemplo, de roedores e insectos. 8. El suelo era impermeable al agua y de fácil limpieza. 9. El suelo era resistente a ácidos, álcalis, disolventes y desin- fectantes. 10. Existían procedimientos para el desecho seguro de resi- duos biológicos especiales. 11. En una de las habitaciones existía una ventanilla de ob- servación entre ésta y la esclusa y otra entre esta última y el exterior, de forma que desde el exterior se podía ver a los ocupantes de la habitación. En la otra habitación existía una ventanilla entre la habitación y la esclusa, pero no en- tre ésta y el exterior. Medidas de contención El citado anexo IV, como se mencionó, incluye una relación de catorce medidas de contención, que habrá que adoptar en función de la actividad, del resultado de la evaluación de ries- gos y de las características del agente biológico. Dado que en nuestro caso se perseguía contener agentes biológicos del pague a la colectividad, sin que exista generalmente una profilaxis o un tratamiento eficaz. Necesidad Un estudio sobre enfermedades infecciosas importadas re- coge como posibles enfermedades que pueda ser necesario atender en España entre las causadas por agentes biológicos del grupo 4 las siguientes: virus de la fiebre hemorrágica de Crimea/Congo, virus de la fiebre de Lassa, virus de Marbug y del Ébola. Todos estos agentes tienen en común que se trans- miten por contacto y no por vía aérea. La enfermedad endémica debida a agentes del grupo 3 con mayor repercusión en nuestro país –fundamentalmente en el medio laboral y sanitario– es la tuberculosis. Los hospitales cuentan con habitaciones para aislar y tratar pacientes infec- tados por esta enfermedad, que se transmite por vía aérea, y por extensión a todas cuyos agentes pertenezcan a este grupo. Estas habitaciones, en muchas ocasiones, también es- tán preparadas para la atención del mismo grupo de agentes cuando la transmisión es por contacto (en el caso de las que se transmiten por vía parenteral no requieren habitualmente aislamiento, sólo prácticas estándar). Ahora deberían adecuar sus instalaciones a una nueva situación. En adelante expondremos cómo un hospital del Servicio Galego de Saúde de la ciudad de Vigo, elegido como centro de referencia para la atención de casos sospechosos de pade- cer enfermedad por virus Ébola que se presenten en Galicia y situado en uno de los puertos designados como puntos de en- trada con capacidad de atención a Emergencias de Salud Pú- blica de Importancia Internacional y que participó en los ejer- cicios MARSEC-14, tuvo que adaptar sus instalaciones a esta nueva situación. Situación de partida El hospital contaba con dos habitaciones de aislamiento situa- das en la Unidad de Diálisis. Existen otras dos más, una en la UCI y otra en otro hospital de la misma área. Estas dos primeras habitaciones se encuentran separadas del resto de las áreas de hospitalización del hospital. El recin- to en el que se encuentran consta de una zona de estar y de control, con un cuarto de baño con ducha, una de tránsito ha- cia las dos habitaciones de aislamiento, en la que existen ar- marios y estantes, para el almacenamiento, y las propias habi- taciones. La entrada y salida a cada una de ellas se hace a tra- vés de una esclusa. A este recinto se llega por un pasillo direc- tamente del exterior, sin atravesar otras áreas del hospital. En caso necesario, y dado que su uso es exclusivo para la aten- ción de los pacientes aislados, el citado pasillo también se pue- de usar como zona de trabajo o almacén. De acuerdo al artículo 14 del citado Real Decreto, dedicado a los establecimientos sanitarios y veterinarios distintos de los laboratorios de diagnóstico, en los servicios de aislamiento en que se encuentren pacientes que estén o que se sospeche que