El SUMMA 112 tiene su ámbito de actuación en la atención a las urgencias y emergencias sanitarias extrahospitalarias de toda la Comunidad de Madrid y tiene desplegados dispositivos por toda su geografía: UVIS móviles, vehículos de intervención rápida (VIR), unidades de asistencia a domicilio (UAD), servicios de urgencias en centros de salud (SUAP)…, y bases de helicópteros, para acceder de manera rápida a zonas de difícil acceso y/o alejadas. Cuenta con un Centro de Coordinación de Urgencias y Emergencias, que es el centro de coordinación sanitaria más grande de Europa. Además, cuenta con dispositivos especiales como un Puesto Médico Asistencial Portátil, para asistencia en caso de accidentes y para cooperación internacional; un Módulo de Intervención Rápida, con alta capacidad asistencial en caso de accidentes con múltiples víctimas; y una Línea de Descontaminación NRBQ (riesgos: nuclear, radiológico, biológico y químico) para casos de accidentes en industrias o atentados terroristas con armas biológicas y químicas.
Todo ello conlleva, desde el punto de vista de la prevención de riesgos laborales, un gran abanico de riesgos a los que los trabajadores pueden estar expuestos: biológicos, químicos, físicos, ergonómicos, accidentes de tráfico, turnicidad, nocturnidad, trabajo bajo condiciones climáticas adversas, etc., difíciles de prever de antemano.
Situaciones traumáticas
La naturaleza del servicio conlleva que el trabajador deba enfrentarse continuamente a situaciones traumáticas de los pacientes que pueden afectar a dicho trabajador. Principalmente, por la implicación emocional que conlleva la actividad sanitaria, y en concreto la atención de urgencia, y por la necesidad de mantener un alto nivel de entrenamiento y efectividad en el trabajo en equipo, incluyendo en lo anterior la posible agresión de pacientes y usuarios, tan conocida en el mundo sanitario. Esto deja en el trabajador una sensación de indefensión ante el riesgo psicosocial, que ha de comprender que es un riesgo inherente a la actividad y que debe ser, y es valorado, por la Dirección del SUMMA 112, y por el conjunto de la sociedad.
Todo esto, junto a la dispersión geográfica de las bases, unido a las actividades de cooperación internacional que se llevan a cabo, hace que la prevención de riesgos laborales y la seguridad y salud de los trabajadores del SUMMA 112 supongan un reto para cualquier servicio de prevención.
La prevención de riesgos laborales en el SUMMA 112 se empieza a articular con la constitución del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales (SPRL) en el año 2001. Es el 061 y su posterior integración del SERCAM, los que dan origen al actual SUMMA 112. La Dirección de esta entidad, con el asesoramiento del SPRL, comienza a desarrollar el Plan de Prevención.
Plan de Prevención de Riesgos Laborales
Como instrumentos esenciales para la gestión del Plan de Prevención de Riesgos Laborales se establecen la “Evaluación Inicial de Riesgos” y la “Planificación de Medidas Preventivas”, entre las que se incluye la vigilancia de la salud, la información y la formación en prevención de los trabajadores.
La evaluación de riesgos es la actividad fundamental que debe llevarse a cabo inicialmente y cuando se efectúen determinados cambios, para poder detectar los riesgos que puedan existir en todos y cada uno de los puestos de trabajo.
Esta evaluación conlleva la visita periódica de los lugares y de los puestos de trabajo, y debido a la amplia dispersión geográfica de las distintas bases, el SPRL cuenta con el apoyo logístico del área de asuntos generales del SUMMA 112. Estas actividades de evaluación son comunicadas a los delegados de prevención con tiempo suficiente para poder asistir y participar en su elaboración, en caso de que así lo estimen oportuno.
Como resultado de la evaluación se establecen una serie de medidas correctoras para eliminar, controlar o minimizar los riesgos detectados, con el establecimiento, junto con la Dirección del SUMMA 112, de unos plazos y un responsable para llevarlos a cabo, en función de la magnitud y del número de trabajadores expuestos. De esta planificación se derivan también, las necesidades de vigilancia de la salud y de formación e información de los trabajadores, así como los equipos de protección individual necesarios para llevar a cabo la actividad.
La vigilancia de la salud, entre otros aspectos, se centra en los protocolos frente al riesgo biológico y en la determinación de necesidades de vacunación frente a enfermedades inmunoprevenibles, ya que la actuación de estos profesionales no solo se circunscribe a la Comunidad de Madrid, sino que hay un colectivo que voluntariamente presta atención en catástrofes internacionales (ERICAM). Para este caso, existe un protocolo específico de vigilancia de la salud. Además se incentiva la promoción de la salud en los trabajadores, tanto de forma individual como colectiva (dieta, ejercicio, hábitos, etc.).
Un apartado especial dentro de la vigilancia de la salud es el de la adecuación del puesto de trabajo a trabajadores sensibles como puedan ser mujeres embarazadas o en periodo de lactancia, inmunodeprimidos o con otras patologías que lo requieran. En este aspecto cabe destacar la buena disposición del Servicio de Recursos Humanos del SUMMA 112 para conseguir la adecuada adaptación del puesto de trabajo al profesional que lo precise.
Respecto a la información y la formación en prevención de riesgos laborales, se lleva a cabo a través de la intranet y cursos presenciales de formación que se organizan. A este respecto cabe destacar la información y formación impartida en la reciente “crisis del Ébola” sufrida en la Comunidad de Madrid. Se ha ofrecido información puntual de protocolos y procedimientos de actuación en la intranet, así como talleres prácticos de formación en el manejo de colocación y retirada de los equipos de protección individual.
Equipos de protección individual
Los equipos de protección individual (EPI) necesarios en cada unidad son entregados a los trabajadores que desarrollan su actividad en las distintas bases, según los riesgos a los que puedan estar expuestos. El propio uniforme es un EPI al que luego se le añadirán equipos de protección complementarios, según el riesgo.
Todo este sistema de gestión de la prevención cuenta con la participación de los representantes de los trabajadores, articulada a través del Comité de Seguridad y Salud que se reúne periódicamente. En este comité participan de manera activa tanto la Dirección del SUMMA 112 como los delegados de prevención, contando con el asesoramiento del SPRL.