La realidad virtual está llamada a transformar en la industria 4.0 cómo entendemos la formación, incluida la aplicada al campo de la prevención y la protección de riesgos laborales.
Así lo ha entendido, Tesicnor, consultora especializada en prevención de riesgos laborales, ingeniería y seguridad industrial. Con casi dos décadas formando a personas y mejorando profesionales en la capacitación y la prevención en todos los sectores, destacando su liderazgo en el ámbito de las energías renovables, donde los trabajadores se exponen a riesgos especialmente complejos: alturas, eléctrico, espacios confinados…
Por este motivo, desde hace un año en su cartera de servicios destacan los de formación a través de la realidad virtual, con una amplia oferta destinada a todo el espectro desde la propuesta más generalista con “VR Extinción de Incendios”, curso que ha causado gran expectación en su puesta de largo en la Feria Internacional de la Seguridad, SICUR 2020. El motivo, la tecnología que aplica y que destaca notablemente sobre el resto de la oferta del mercado, ya que consigue una experiencia 100% verídica, al usar un extintor real adaptado. El alumno siente el peso verdadero del objeto y opera exactamente como lo haría ante una emergencia. Es decir, agita el contenido, retira la anilla de seguridad y descarga el extintor sobre el fuego, intentando sofocar el incendio en los 24 segundos que dura la descarga del extintor. Mientras, el monitor visualiza en streaming su ejecución, a fin de evaluar la eficacia del trabajo y planificar acciones futuras. Este curso está disponible para diferentes escenarios: oficina, centro hospitalario, entorno industrial y particulares de la energía eólica, ground y nacelle.
Tesicnor completa el catálogo con dos cursos específicos del sector eólico “VR Formación en elevadores”, donde se aprende a usar, evacuar y descender en caso de emergencia los elevadores más habituales. Y “VR Descenso de Emergencia desde el aerogenerador”, donde el alumno en un entorno seguro y sin riesgo evacúa el aerogenerador desde la nacelle.
Ventajas del uso de la realidad virtual en la prevención de riesgos laborales
Esta tecnología ofrece al alumno libertad de movimiento e interacción. Otorga al usuario un papel protagonista, aumentando el interés y la motivación. Todas las sensaciones experimentadas se convierten en un recuerdo perdurable, mejorando así el proceso formativo, al tiempo que entrenan en comportamientos seguros y eficaces ante procedimientos complejos y arriesgados, libres de amenazas.
La realidad virtual amplía el horizonte de la formación en prevención de riesgos laborales, con más personal formado y mejor entrenado, adiestrado en entornos realistas libres de riesgo, escalable y con resultados medibles
En este sentido, en el desarrollo y creación de los cursos, Tesicnor apuesta por equipos de trabajo multidisciplinares formados por desarrolladores y técnicos en prevención de riesgos laborales.
Otro punto fuerte es el alto grado de realismo, equiparable a una experiencia del mundo real, con el valor añadido de poder completar la experiencia virtual con información adicional que enriquece el aprendizaje: desplegables, vídeos. Y, sobre todo, otorga a la formación práctica de flexibilidad, al no requerir de elementos reales y de poder recopilar los datos del entrenamiento con el objetivo de evaluarlo y mejorarlo.
La realidad virtual fomenta el aprendizaje estandarizado y por repetición, al tiempo que posibilita la multiplicidad de localizaciones geográficas. La realidad virtual permite que una misma sesión puede realizarse con alumnos ubicados en diferentes puntos geográficos.
Finalmente, cabe destacar el bajo coste y la facilidad de implantación de esta tecnología de vanguardia. La realidad virtual permite ejecutar todo tipo de ejercicios prácticos, ahorrando recursos económicos, con una reducción del gasto por desplazamientos y dietas y con la eliminación de inversión en equipamientos físicos. A modo de ejemplo, en un curso convencional de extinción de incendios cada extintor tiene un coste estimado de 15 euros por recarga; en una formación práctica se emplea, al menos un extintor por persona, además de los honorarios del formador, y sin obviar, el impacto medioambiental que tiene la liberación de este tipo de agentes químicos.
En resumen, esta tecnología amplía el horizonte de la formación en prevención de riesgos laborales, con más personal formado y mejor entrenado, adiestrado en entornos realistas libres de riesgo, escalable y con resultados medibles. Aunque al hablar de realidad virtual pensemos automáticamente en el mundo de los videojuegos, la realidad virtual se convierte en una oportunidad para el sector de la salud laboral aportando una nueva forma de entender la formación de prevención de riesgos laborales, en la que Tesicnor trabaja para llevar la vanguardia a sus clientes.