El nuevo Reglamento (UE)2023/988 supone la actualización de la normativa europea sobre seguridad general de productos y va a conllevar la derogación de la Directiva 2001/95/CE el 12/12/2024.
¿En qué va esto a afectar a las escaleras de mano? Hasta ahora las escaleras de mano eran productos para el consumidor, sin normas de obligado cumplimiento EN131, que permitían poner en el mercado escaleras sin cumplir las específicas normas de seguridad de la UE: a partir de la entrada en vigor del reglamento, todos los productos -incluidas las escaleras de mano que se fabriquen y comercialicen en Europa- deben ser seguras. Esto implica una ampliación de la trazabilidad y una responsabilidad extendida a toda la cadena de suministro.
Los importadores deberán garantizar que las escaleras de mano cumplan con las normas de seguridad EN131 1-2-3-4-6-7, según el modelo de escalera correspondiente. Además, los distribuidores tendrán la obligación de participar activamente en el monitoreo de la seguridad a lo largo del ciclo de vida del producto, lo que incluye la provisión de repuestos, consumibles y accesorios. Incluye obligaciones para la venta online y marketplaces para la seguridad del consumidor, pudiendo denunciarse la publicidad engañosa, se introducen sanciones armonizadas a nivel de la UR y se refuerza la supervisión del cumplimiento por parte de los organismos de control.
El nuevo Reglamento (UE)2023/988 introduce el ‘Safety Gate’ para que el consumidor de manera clara pueda consultar las alertas de productos inseguros con un acceso efectivo y transparente. Se deben integrar las nuevas tecnologías como códigos QR para mejorar la trazabilidad de los productos y facilitar su retirada en caso de ser inseguros.
Los marketplaces y las plataformas de venta por catálogo deberán retirar los productos inseguros y colaborar estrechamente con las autoridades y el ‘Safety Gate’. Además, el reglamento establece la necesidad de mejorar las garantías de seguridad a medida que avanzan las tecnologías y crece el comercio electrónico.
Existen lagunas en el control de productos importados o fabricados en la UE y la trazabilidad de ellos mismos resulta complicada de evidenciar, así que la falta de regulación adecuada para supervisar la calidad y la seguridad de los productos ha puesto de manifiesto la necesidad de actuar con un reglamento que, como saben, es la ley europea que obliga de manera inmediata a su cumplimiento, frente a una directiva que permite trasponerla a la legislación nacional.
El nuevo reglamento busca mejorar la vigilancia del mercado y aumentar la cooperación entre los Estados miembros para controlar de manera más efectiva los productos que se comercializan en la UE. Esto implicará una mayor responsabilidad de las plataformas digitales para garantizar la seguridad de los productos que ofrecen.
La Directiva 2001/95/CE tiene pues los días contados: su validez está establecida hasta el 12/12/2024 tras lo cual será derogada por el Reglamento (UE)2023/988
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