Con el tiempo, la formación e información de los trabajadores en el ámbito de la prevención de riesgos laborales es imprescindible para cumplir las políticas de seguridad y salud en el trabajo, sobre todo, en el calzado. Debido a su gran variedad de opciones y funciones para su elección se precisa una evaluación exhaustiva de los riesgos existentes en el trabajo.
Utilizando una bota de trabajo de seguridad específica para trabajos pesados podremos evitar lesiones desagradables como perforaciones, aplastamiento, fracturas, esguinces, o dependiendo de la intensidad del golpe o corte sufrido, el desmembramiento de alguno de los dedos del pie. La seguridad laboral es algo que debemos de tener muy en cuenta. Por ello, la utilización del calzado de seguridad es obligatoria en la totalidad de puestos de trabajo con riesgo de lesiones en pies.
Se considera equipo de protección individual de pies o piernas al calzado de seguridad, calzado de protección o calzado de trabajo que cubre el pie con el fin de hacerle frente a un o varios riesgos específicos, como pueden ser los deslizamientos, tropiezos, pinchazos, golpes, atrapamientos, cambios bruscos de temperatura, agentes químicos o biológicos y contacto eléctrico. El Ministerio de Trabajo agrupa los riesgos de esta manera:
- Riesgos mecánicos.
- Riesgos eléctricos.
- Riesgos químicos.
- Riesgos térmicos.
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