Los empleados públicos en España tendrán que enfrentarse a partir de ahora a pruebas de desempeño. Inicialmente se planteó que suspender esta evaluación implicara perder el puesto de trabajo. Pero el Gobierno ha aprobado por Real Decreto la Ley de Función Pública, excluyendo que los funcionarios puedan sufrir un despido.
La Unión Europea ha instado al gobierno español a implementar pruebas individuales para evaluar la conducta profesional y rendimiento de los empleados públicos, con el objetivo de garantizar la eficiencia y calidad de la administración española. Estas medidas, que refuerzan la evaluación del desempeño, entraron en vigor el pasado jueves 21 de diciembre, según lo publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el día anterior
¿Llega a España el despido de funcionarios con la prueba de desempeño?
La normativa parte de un Real Decreto-Ley de medidas urgentes para la ejecución del Plan de Recuperación aprobado por el Consejo de Ministros. En el texto se recogen cambios en el modelo de Función Pública en relación a recursos humanos, nuevos sistemas de acceso o una evaluación de desempeño.
La evaluación del desempeño obligatoria es el núcleo de estas medidas. Esta prueba se centrar en evaluar la conducta profesional y el rendimiento del funcionario. Esto con el objetivo claro de mejorar la productividad y, por ende, el rendimiento de los servicios públicos. Sin embargo, el gobierno destaca que no implicará la pérdida de la condición de funcionario para aquellos que no superen las evaluaciones.
Qué pasa si el resultado es negativo
En caso de resultados negativos, se implementarán medidas para formar y equipar a los empleados públicos con instrumentos que les ayuden a mejorar su desempeño en el trabajo. El gobierno insiste en que estas evaluaciones se plantean de forma positiva, buscando que haya mayor participación y ofreciendo constantes oportunidades de mejora de condiciones como incentivo para revertir situaciones desfavorables.
Por otro lado, para aquellos funcionarios que superen las evaluaciones, se prevén beneficios directos, incluyendo la remuneración del complemento de desempeño, que reemplazará al complemento de productividad. De la misma forma, se fomentará la ascenso profesional, siendo determinante en concursos de méritos y acceso a formaciones especializadas.
Reacción de los sindicatos
Distintos sindicatos como la UGT o CCOO criticaron el anteproyecto de ley, afirmando que era un paso para remover a empleados a través de pruebas de desempeño sin una defensa administrativa.
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