Conforme se van celebrando los partidos del Mundial de Catar, permanece la larga sombra de las cifras de muertos. Según un informe de Amnistía Internacional habrían muerto cerca de 15.000 trabajadores en las obras de la Copa de Fútbol. Pero lo cierto es que estas cifran engloban las muertes de todos los trabajadores extranjeros fallecidos en territorio catarí entre 2011 y 2020; independientemente de que fueran profesionales de la construcción, profesores o jardineros.
La versión de The Guardian sobre los muertos del Mundial
De acuerdo al diario británico The Guardian, serían 6.500 trabajadores muertos en los trabajos de construcción de los estadios del Mundial de Catar. Los principales países de procedencia son Pakistán, India, Sri Lanka, Nepal y Bangladesh, cuyas autoridades fueron consultadas para obtener los datos. Respecto a esta cifra, el gobierno catarí no la desmiente. Pero su Ministerio de Información declaró que «la cifra está el rango esperado para una población de este tamaño y demografía».
The Guardian reveló también que los médicos cataríes daban como «causa de muerte natural» un paro cardiorrespiratorio en cerca del 70% de las muertes de trabajadores inmigrantes. Según epidemiólogos, estas muertes no son naturales, por tratarse de personas entre los 18 y los 60 años de edad.
La FIFA reduce a tres los muertos del Mundial
Por otra parte, la FIFA y el Comité de la Copa Mundial de Catar afirman que solo tres muertes tuvieron relación directa con la construcción de los estadios del Mundial. Otras 37 tendrían una relación indirecta, según estas fuentes.
Dos muertes están documentadas: un operario que cayó de una gran altura y otro atropellado por un camión cisterna. Pero las cifras oficiales no contemplan los fallecimientos de trabajadores en la construcción de otros recintos edificados para el macroevento futbolístico.
El documental de la televisión alemana: «El Mundial de la Vergüenza»
La cadena de televisión alemana ARD ha producido el documental «El Mundial de la vergüenza«. La cinta incluye el testimonio de médicos cataríes presionados para rellenar los certificados de defunción falsos. Ya en 2014, el despacho legal internacional DLA Piper denunció esta práctica en un informe independiente encargado por el Gobierno catarí.
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