La utilización de productos químicos se ha extendido a prácticamente todas las ramas de actividad, dentro del ámbito hospitalario. Por una parte, se manipulan productos o sustancias químicas propias del entorno asistencial (laboratorios, quirófanos, etc.), como son el formaldehido o citostáticos; y, por otra, los de uso en el entorno hotelero del hospital (servicios de mantenimiento, limpieza, etc.), como los desinfectantes o cloruros.
En uno y otro caso, la probabilidad de que un accidente se produzca está presente.
Es sobre el índice de esta probabilidad en el que podemos y debemos incidir todos los trabajadores; tanto para tratar de eliminarlo o, en todo caso, minimizarlo.
Es primordial que la Unidad de Prevención de Riesgos Laborales (UPRL) sepa implicar y concienciar a todos los trabajadores sobre la importancia de cumplir con las reglas y normas generales de seguridad, aplicables durante el manejo de productos químicos; puesto que la mala praxis de un solo trabajador puede afectar a la seguridad del grupo. Por ello, el objetivo del equipo directivo debe estar orientado hacia la búsqueda de ese compromiso por parte de todos los actores del centro de trabajo.
Según los datos de accidentabilidad disponibles en nuestra área sanitaria, es alarmante comprobar que el 83% de los accidentes que se produjeron fueron debidos a fallos/errores humanos, estando éstos relacionados con una mala práctica del personal, y el 17% debido a otros factores, ya fuesen: falta de formación, inexperiencia del trabajador, fallos técnicos, etc.
Por todo esto, la primera actuación que se efectuó por parte de la Unidad de Prevención de Riesgos Laborales fue realizar una serie de sesiones informativas generales relacionadas con el manejo de productos químicos, dirigidas a todos los trabajadores.
El contenido de estas sesiones fue muy genérico, para posteriormente abordar una formación más específica por servicio.
Las medidas básicas de prevención de riesgos, que todo trabajador debe tener presentes durante la manipulación de productos químicos, son:
Adoptar las normas mínimas de seguridad ante la manipulación de químicos.
Uso de EPIS (Equipos de Protección Individual) básicos. Según el producto químico que se maneje se requieren unos equipos específicos que completarán los anteriores.
Medidas de actuación inmediatas, en caso de accidente.
Una formación adecuada unida a una buena praxis son los pilares de la Seguridad Laboral
Normas mínimas
Conocer qué tipo de producto químico estamos manipulando. Todo producto debe estar etiquetado. Su ‘etiqueta’ incluye la simbología referente a los peligros inherentes a dicha sustancia o preparado (frases H) y a los consejos de prudencia (frases P).
Los envases deben estar siempre etiquetados. No se pueden reutilizar envases sin haber retirado la etiqueta original; la nueva sustancia debe estar perfectamente identificada.
Cerrar correctamente los envases. Todo envase debe ser cerrado correcta e inmediatamente tras su uso, aunque tengamos que manipularlo sistemáticamente.
Cuadro de productos incompatibles. Es muy importante almacenar adecuadamente los productos, atendiendo a sus incompatibilidades o a su posible reacción en contacto con otros.
Higiene personal. Lavarse siempre las manos después de haber estado en contacto con productos químicos, no comer (no mascar chicle), no beber, mientras se manipulan químicos, y no oler, al menos, si desconocemos que tipo de producto es.
EPIS básicos
Como mínimo debemos protegernos con:
- Guantes. Las cualidades de los mismos dependerá del tipo de producto que estemos utilizando.
- Mascarilla, también estará en función del producto que se manipule.
- Protección ocular, tipo gafa o pantalla.
Actuación inmediata
En caso de exposición accidental:
- Ante cualquier exposición accidental, debemos avisar a otro compañero de trabajo. Informarle del accidente sufrido, para que permanezca alerta a cualquier posible reacción del accidentado.
- En caso de inhalación, trasladar al accidentado a una zona con aire limpio, mantenerlo semi-incorporado y proporcionarle asistencia médica.
- En caso de salpicadura, enjaguar abundantemente con agua varios minutos y proporcionarle asistencia médica.
- En caso de derrame, quitar las ropas contaminadas, enjuagar la piel con abundante agua y proporcionarle asistencia médica.
- En caso de ingestión, enjaguar la boca, no provocar el vómito y proporcionar asistencia médica.
Después de haber analizado los accidentes derivados del manejo de productos químicos, registrados en nuestro centro de trabajo, observamos que las causas que ocasionaron los más graves estuvieron relacionadas con esa falta de atención a las ‘normas básicas’, ya mencionadas anteriormente.
Unos ejemplos de este tipo de imprudencias, fueron:
- Derrame de formaldehido sobre un trabajador (A), en el servicio de Anatomía Patológica. La causa principal del accidente fue que el trabajador (B), que cerró y almacenó los envases, no se aseguró que éstos estuviesen adecuadamente cerrados. Debido a ello, cuando el trabajador (A) manipuló un envase de 10 litros, que contenía una pieza anatómica, el contenido del mismo se le derramó sobre su tórax y miembros inferiores.
- Salpicadura de cloro a los ojos. El trabajador afectado fue del servicio de mantenimiento. Realizaba tareas de reparación en una tubería de cloro cuando sufrió la salpicadura, siendo la causa principal del accidente el no hacer uso de la protección ocular.
Como podemos comprobar, ambos accidentes podrían haber sido evitables; en el primer caso, existe la implicación de una persona distinta al propio accidentado y, en el segundo, fue el propio trabajador el que dejó de utilizar un EPI básico.
Dado que las consecuencias de los accidentes derivados del manejo de sustancias/preparados químicos pueden ser graves, o en algunos casos muy graves, es importante que la UPRL imparta de forma periódica esta formación básica, que se complementará con:
- Formación teórica específica. Destinada a cada grupo de trabajo en particular, centrándose en las medidas y EPIS específicos, según el producto o productos que manejen.
- Formación Práctica. Realizar ejercicios prácticos con los trabajadores les ayuda a que adquieran la rutina de trabajo. Esta formación está orientada a la colocación/retirada de los EPIS, manipulación de productos, manejo de envases, etc. Con este tipo de formación se consigue que los actores que están visualizando la ejecución del mismo, observen y reflexionen sobre las consecuencias de una mala práctica.
- Realización de simulacros ante un accidente y/o derrame de productos químicos. Este entrenamiento, realizado siempre con sustancias inocuas, nos permite: detectar posibles fallos, entrenar al personal para poder socorrer a un accidentado y poner en marcha el protocolo de actuación ante una emergencia, tanto desde el punto de vista medio ambiental como de asistencia sanitaria.
- Reconocimientos médicos. Informando y aconsejando a los trabajadores sobre la conveniencia de acudir a los reconocimientos médicos periódicos; reconocimiento en el que se aplica el protocolo de Manejo de Productos Químicos y se hace la valoración correspondiente.
Actualización de la legislación que aplica: las reformas que se producen en la legislación que aplica a los ‘Productos Químicos’, pueden requerir o, en algunos casos, exigir que se adopten cambios o modificaciones en los EPIS empleados para su manejo, cambio en los protocolos de trabajo o tener que adoptar nuevas medidas de protección. Uno de los últimos cambios importantes que se produjo fue el 1 de enero de 2016 con la entrada en vigor del Reglamento (UE) nº 2015/491, por el que se modifica el Reglamento 1272/2008 del Parlamento Europeo y del Consejo sobre clasificación, etiquetado y envasado de sustancias y mezclas. Este Reglamento determina que el formaldehido pasa de tener una clasificación de sustancia peligrosa de Categoría 2 (Sospechoso de ser cancerígeno para el hombre) a ser considerado de la Categoría 1 (Cancerígeno o supuesto cancerígeno para el hombre).
Recordemos: una formación adecuada unida a una buena praxis son los pilares de la Seguridad Laboral.
Bibliografía:
Ley 31/1995 de 8 de noviembre de Prevención de Riesgos Laborales
Real Decreto 665/1997, de 12 de mayo, sobre la protección de los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición a agentes cancerígenos durante el trabajo.
Reglamento (UE) nº 605/2014 de la comisión de 5 de junio de 2014 que modifica, a efectos de la inclusión de indicaciones de peligro y consejos de prudencia en lengua croata y su adaptación al progreso técnico y científico, el Reglamento (CE) nº 1272/2008 del Parlamento Europeo y del Consejo sobre clasificación, etiquetado y envasado de sustancias y mezclas.
Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSHT). Notas Técnicas NP 878,880,88.
Instituto de Salud Carlos III. Asociación Nacional de Medicina del trabajo. Agentes Químicos en el ámbito sanitario.