FSL-LATAM_006

53 Segundo semestre 2018 Un más de una ocasión es posible que nos hayamos encontra- do en la siguiente situación: montamos un programa para pre- vención de riesgos en un tema especí co, de nimos unos obje- tivos, trazamos metas, realizamos un plan detallado, en las ac- tividades está el plan de capacitación, los procedimientos, for- matos, presentaciones, ayudas audiovisuales, nos preparamos durante días o semanas, realizamos todas las sesiones progra- madas, nuestros indicadores están al cien por cien y ocurre lo “inesperado”. Más temprano que tarde alguien incumple el pro- cedimiento establecido y lo identi camos en inspecciones pe- riódicas o peor aún, se presenta un incidente o un accidente an- tes de poder hacer algo más. Durante la investigación surgen cualquier cantidad de planes de acción para trabajar en las causas raíz de la situación, imple- mentamos nuevos controles de ingeniería, nuevos y más rigu- rosos procedimientos, más formatos para diligenciar y más ins- pecciones para realizar. Lo cual nos lleva nuevamente a realizar capacitaciones que van aumentando gradualmente en compleji- dad y se suman a la gran cantidad de otros procedimientos que debe cumplir una persona, adicional a los de seguridad y salud laboral. Si en algún momento nos hemos centrado en investigar si se está dando realmente un aprendizaje en las capacitaciones im- partidas, habremos podido comprobar que el aprendizaje es muy volátil, se difumina rápidamente en cuestión de horas o días, lo cual indica una falencia signi cativa en este aspecto. Di- cha falencia se da no por falta de recursos, voluntad o buena in- formación, se da entre otras causas por el modelo de enseñan- za que utilizamos, el cual viene in uenciado por décadas de es- tudio en educación básica, secundaria y universitaria donde se utiliza un modelo conductista muy arraigado en nuestra cultura, basado principalmente en mostrar un ejemplo a seguir y espe- rar que los demás sigan el mismo modelo sin desviarse. Este modelo sigue siendo nuestra base en muchos procesos y aunque hoy en día está muy revaluado y superado por modelos más efectivos como las pedagogías activas (Humanismo), Cog- nitivas (procesos neurológicos), socioconstructivistas y críticas, y se tienen además diferentes enfoques por competencias, por proyectos, por descubrimiento, resolución de problemas, en- tre otros. La propuesta del autor es implementar un modelo por aprendizaje interactivo (por experiencias) para la efectiva formación en prevención de riesgos laborales, donde el centro del aprendizaje no sea el procedimiento o formato a seguir sino que estos sean ayudas didácticas durante y después del proceso de formación. El centro del aprendizaje será entonces la interac- ción entre la persona y el equipo, proceso o actividad. Entendiendo además que el ser humano tienes varias dimen- siones, debemos tener en cuenta adicional al conocimiento in- telectual (procedimientos), el aspecto humanístico y la práctica o actuación para que el aprendizaje se dé de forma más efec- tiva. En las próximas líneas daré algunas pautas para los dos úl- timos dado que mucho se ha trabajado en el primer aspecto. El conocimiento humanístico implica valorar de forma in- tegral todo el proceso, valorar el trabajo realizado por todos los expertos que desarrollaron los procedimientos y formatos, valorar a la persona sujeto del aprendizaje, valorar su pasado, presente y futuro laboral y personal, valorar los procesos a de- sarrollar y la importancia de hacerlos de la mejor forma posible. Para que esta valoración se dé propongo los siguientes pasos: 1. Involucrar a la persona en los procesos de creación de pro- cedimientos, formatos y material de aprendizaje. 2. Valorar la experiencia de las personas para la creación de los programas, teniendo en cuenta recomendaciones y estu- dio de casos ocurridos. 3. Dar libertad en las sesiones de aprendizaje para expresar ideas, sentimientos y sugerencias. La persona no es solo ra- Implementación de un aprendizaje interactivo para la prevención efectiva de riesgos laborales C ASO DE ÉXITO EN CONTROL DE ENERGÍAS PELIGROSAS Leonardo Calderón Jaramillo Gerente de K&L Consultores Figura 1. Aprendizaje del siglo XXI. Adaptado de www.theflippedclassroom.es colombia