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39 Primer semestre 2018 no estadounidense, Unión Europea, y eje de países orientales. El consumo de drogas en Colombia, conocida por su producción y no su consumo, se disparó en nuevas generaciones. Las hectá- reas sembradas en este extenso país de condiciones geográficas variadas y riesgosas que desde luego no cumple ninguna norma y sí genera un infraregistro anónimo que nunca conoceremos, de accidentes, defunciones, crímenes, enfermedades, intoxicaciones, protección en seguridad social y cuidado a la salud. Estas bandas criminales, que invaden ya no ciertas regiones, han logrado llegar a las grandes urbes, y son un factor de temor premamámente para la sociedad la empresa y los entes encargados de salvaguar- dar la seguridad nacional. Enfermedades Es para Colombia un momento crucial, de temor y de incerti- dumbre que ya de hecho enferma a la sociedad entera: stress , suicidios, enfermedades cardiovasculares, psiquiátricas, digestivas, nutricionales, neurológicas y físicas-osteomusculares. Todo esto se junta a la caída en la informalidad del trabajo decente, del aco- so laboral, de la falta de protección y descuido por empleadores para sobrevivir a la crisis, expectantes, con desconfianza y parco proceder, grandes niveles de corrupción. En plena campaña elec- toral, el país polarizado y frustrado por un proceso de paz, al cual todos llegamos a imaginar la utopía, el desarrollo, el crecimiento, la vida, y las condiciones, ha sufrido por décadas las acciones de las organizaciones narcoterroristas. El país en quiebra y con estas condiciones espera ansioso ese futuro incierto con la ejecución de las leyes y normas que rigen la protección a nuestra población trabajadora, sus derechos a la prevención y a ejercer sus labores de manera digna, tranquila, se- gura, con progreso y desarrollo personal, uniéndose una positi- va proyección económica, pensional, retiro, y derechos familiares. Todo ello adquiridos de hecho a través de una vida de trabajo y con sus efectos sobre su cuerpo, mente, familia. Esperamos con prontitud y por el bienestar de todos los co- lombianos el acontecer y las nuevas políticas en bien de un pue- blo cansado de incertidumbre. les y multinacionales migrando al exterior y la incertidumbre de un país próspero hasta hace pocos años afecta al desarrollo, rela- ja la norma, la inversión y mantiene a su pueblo ya afectado enor- memente por el desempleo, por la sombra de un comunismo destructor; pues es lo que ve el colombiano, teniendo en cuen- ta los ejemplo en espejos de Brasil, Argentina, Venezuela, Nica- ragua, Bolivia, etc. Como efecto de esta debacle y de los indica- dores a todo nivel de la economía colombiana y calificaciones de riesgo internacional, un problema ideológico, económico y políti- co afecta y pone en riesgo toda la seguridad, la salud en el trabajo y el hogar, el cual es imposible de controlar. Las empresas que lu- chan por subsistir e invertir en Colombia hacen esfuerzos, refle- jados en las cifras, destacando el cumplimiento y mantenimiento de empleos e inversión en seguridad industrial. Será el futuro y la terminación del actual proceso electoral y su impacto el que de- fina la incertidumbre; el manejo de la economía, quienes deter- minen el comportamiento y modelos de economía, junto con la migración. Al acecho preventivo muchos han ido abandonando a Colombia, las grandes generadoras de empleo y la fuga de capi- tales como medidas preventivas de los inversionistas nacionales y extranjeros; y la inversión económica de empresas fuera de Co- lombia como la venezolana, que incrementa las expectativas ne- gativas del pueblo. Definitivamente, son una realidad en cada rin- cón de Colombia, aumentan el desempleo y desplazan a los na- cionales, elevando cifras de desempleo. Un panorama de incertidumbre que afecta a todas las condi- ciones laborales, la salud en general y el riesgo ocupacional. Las cifras arrojan un aumento de la accidentalidad laboral, la enfer- medad laboral, los riesgos, disminución en programas de preven- ción y promoción de la salud y el estrés, no solo laboral. La so- matización, las enfermedades de orden general y el trastorno en la adecuada atención profundizan la crisis. La contracción econó- mica irregular, la percepción del colombiano y de la empresa pri- vada, siendo temerosa y desconfiada frente al histórico cambio, supone la competencia de implantar y enfrentar por primera vez en Colombia la temida tendencia socialista-comunista que ha in- vadido a Latinoamérica. Por los hechos conocidos y el caos gene- rado en otras naciones vecinas, amenazan las banderas de la de- mocracia y la libertad, teniendo como caso específico con gran- des y negativas consecuencias la Reforma Tributaria 2017, que en gran parte ha sido la detonadora del pánico y huida de capitales. No solo en grandes estamentos con grandes inversionistas y em- presas nacionales e internacionales, también en la familia que ha visto mermado los ingresos básicos disminuyéndolos, pues la ca- nasta familiar, la salud, y los aportes a pensiones, consumo de pro- ductos y bienestar familiar, cuidado personal, descanso, aumenta el empleo irregular e inestable. La desmovilización de guerrilleros y paramilitares han hecho que la producción de cocaína y la delincuencia organizada enfren- tadas entre sí sean las actividades criminales e ilegales que em- plean a más personas cesantes, de acuerdo a cifras de produc- ción y comercialización del Departamento de Estado, de tráfi- co de drogas, incautaciones, y mediciones por parte del Gobier- colombia